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Romanticismo literario alemán, la historia de una nación

Romanticismo literario alemán, la historia de una nación

El arte, en especial la literatura, no tiene cabida como una expresión ajena a los contextos sociopolíticos del escritor, de la época o de la trama en sí misma. La relación entre obra y contexto se ve aún más reforzada cuando estudiamos una corriente literaria.

El Romanticismo literario alemán abarcó el final del siglo XVIII y la primera mitad del siglo XIX. Este movimiento fue una contraposición al neoclasicismo incrustado en la era de la Ilustración que venía desarrollándose en toda Europa.

La Ilustración dio paso a las revoluciones emancipadoras y a las discusiones de clase. El Romanticismo y sus características fueron tachadas, en ese entonces y hasta avanzado el siglo XX, como una expresión de la recientemente formada clase burguesa. Pero la verdad es que el movimiento Romántico fue un hito en la reformulación de conceptos literarios como la belleza y el objeto artístico. 

Las acciones en el Romanticismo parecen estar siempre impulsadas por el arrebato de las emociones por encima de la razón y la lógica. Esta supremacía emocional permitía también que las estructuras fijas y rígidas del Clasicismo se rompieran y permitieran una fluidez y libertad en la composición. 

La exaltación de los sentimientos que proponía el Romanticismo estaba acompañada por la añoranza de lo atávico. Esta añoranza involucraba dos vertientes, por un lado, la idea de que “todo tiempo pasado siempre será mejor”, y la de que lo autóctono y aborigen eran la esencia de la nobleza y la pureza. Por otro lado, la reivindicación de lo patriótico y el nacionalismo. Esta última característica tuvo un impacto absoluto en el Romanticismo alemán. 

Historia de una nación literaria. 

La historia de Alemania está llena de reveses y tretas políticas. Esta complicada historia incluía el hecho de que los gobiernos eran incapaces de conformarse plenamente, por las diferencias entre los disímiles pueblos que conformaban el mundo pangermánico. Feudos, reinados, naciones, las diferencias políticas entre los grupos que intentaban unificarse en un solo territorio impedían el desarrollo de una tradición literaria real. 

Las diferencias lingüísticas fueron igualmente una traba enorme en el desarrollo de la literatura alemana. El alemán como idioma oficial en las instituciones formales se aceptó alrededor de 1770; antes de eso, el latín era la lengua que unificaba la producción escrita y el conocimiento en el país.

Considerando que Las tribulaciones del joven Wether, de Goethe, la primera obra considerada Romanticismo alemán, fue publicada en 1774, es bastante acertado entender que el Romanticismo es de las primeras expresiones escritas en su propio idioma, bajo sus propios términos. Y, por tanto, sería primordial para entender la conformación de su propia identidad poética. 

La tradición oral, la sabiduría ancestral, las leyendas y el folclore popular pangermánico se volvieron el eje alrededor del cual la literatura giraba. El agregado de la fantasía, el misticismo y el mundo sobrenatural terminaron por formar parte de esta corriente que buscaba ya romper con las tradiciones realistas y conservadoras del Clasicismo.

Previo al Romanticismo alemán encontramos al Sturm und Drang, un movimiento regional considerado precursor y perfilador del Romanticismo en Alemania. El Sturm und Drang revolucionó por la insistencia que hacía en la subjetividad, y en la incomodidad ante la sociedad de la época, limitada por los contrastes sociales y las falsedades moralistas.  Goethe, maestro fundador del Romanticismo alemán, es también fundador del Sturm und Drang, por lo cual lo podríamos entender como una incursión de rasgos prerrománticos. 

El Romanticismo definió y perfeccionó la tipología de la literatura alemana. La literatura como expresión de nación se retroalimento con la cultura, historia y política de la época. La voluble situación nacional impacto en las letras alemanas, pero la literatura romántica también se constituyó como un emblema de lo nacional y lo popular en la región.

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